EL PEDANTE QUE USA VOCABLOS ANGLOSAJONES SE RIDICULIZA A SÍ MISMO
Body pump, streaming, banner, coaching, scouting son absurdos anglicismos que se usan a diario y en algunos casos sin conocer su significado exacto, generando situaciones kafkianas, todo sea por ser “cooler”.
En el sector financiero está más desarrollada esta invasión, liderada por una banca ansiosa de impresionar al cliente con vocablos extraños, para confundirle y manejarle mejor; cash pooling, bullet, back office, hedge funds, leverage son sus armas para ello.
Se valora más a una persona que usa anglicismos en su discurso que a otra que no, aunque esté más preparada, es sinónimo de modernidad, y eso gusta mucho.
Lucho a diario contra esta estupidez, aunque me digan que mi batalla está “lost”. El colmo ha sido un evento al que me invitó un banco de primera línea esta semana, sobre las posibilidades de negocio en un país sudamericano en el que está muy implantado, participaba el propio gobierno del país, y la invitación venía en INGLÉS. Envié un correo solicitando explicaciones y aún estoy esperando respuesta.
Aprendamos de Unamuno que en una conferencia sobre Shakespeare, pronunció ese nombre literalmente en castellano, al recriminarle su error, contestó “no, la conferencia es en castellano, y así lo he leído”.